La pandemia de la COVID-19 ha causado una auténtica revolución en el mundo laboral del siglo XXI. Nunca en la memoria viva de la mayoría de las personas se había producido un fenómeno global que remodelara el mundo laboral de manera tan drástica en un gran número de países, dominando la actividad económica y modificando la perspectiva del equipo humano, tal vez de forma irreversible. Aunque el periodo de cambios no ha terminado, ya está claro que las cosas nunca volverán a ser como antes.

El estudio People at Work de este año captura con detalle estas transformaciones únicas y fascinantes. Permite ver hasta qué punto están extendidas y cómo existen patrones constantes en algunas de las tendencias emergentes y en aumento, sin dejar de subrayar los matices y la complejidad de la situación a nivel local.

Mientras empresas y trabajadores lidian con una presión y disrupción constantes, los resultados señalan en qué medida la contratación y la retención están entre los temas más relevantes para las empresas actualmente y cuál es su repercusión para el entorno laboral.

El paquete completo de lo que quieren los trabajadores ha adquirido un nuevo significado. Ya no se trata solo del sueldo y otros beneficios financieros con algunos incentivos: las empresas deben considerar un conjunto de factores mucho más amplio y diverso para fomentar el sentimiento de satisfacción y estabilidad en el trabajo entre los empleados. Junto a consideraciones como la nómina y el avance profesional, la conciliación entre la vida laboral y la personal, el bienestar y la familia, los valores corporativos de las empresas también están en el punto de mira. Los desafíos son más importantes que nunca. La pandemia ha hecho que se replanteen las prioridades y los trabajadores manifiestan estar dispuestos a irse si las empresas no cumplen sus estándares en varios frentes. La cuestión es si las empresas pueden satisfacer la demanda del equipo humano y seguir alcanzando sus objetivos empresariales.

Para las empresas, gestionar esta nueva dinámica y asegurar el equipo humano durante este período de incesantes cambios radicales debe ser un cuestión primordial. Para ello, tienen que plantear las preguntas correctas con el fin de comprender mejor a los trabajadores (lo que incluye comprender cómo ha cambiado la actitud predominante) y tratar de ajustar su planteamiento en consonancia. Es posible que tengan que tomar decisiones valientes y cuestionar las suposiciones, pero muchas empresas ya son expertas en eso. Este estudio pretende servir de guía al plantearse qué cuestiones clave es preciso abordar y de qué manera.

Estas son las principales conclusiones:

  • Los trabajadores quieren un cambio: reevaluación de la importancia de la estabilidad laboral y la ética de las empresas
  • Satisfacción y perspectivas en el trabajo: altas expectativas de los empleados
  • Salario y beneficios: el salario es una prioridad, pero no es lo único que importa
  • Salud mental: aumenta el estrés y el trabajo se ve afectado
  • Teletrabajo y condiciones de vida: la disposición al cambio

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